La Volkswagen T-Roc sigue siendo un protagonista, sin importar las últimas novedades y anuncios de la marca alemana. Claro que para no perder ni un poco de lustre, Volkswagen ha llevado a Frankfurt a la versión R-Line, un paquete deportivo que lo hace mucho más apetecible.
Este paquete especial añade carácter en la forma de las defensas al color de la carrocería, insertos de color en la puerta, faros traseros oscuros y un difusor trasero, así como insignias R-Line para identificarlo.
Pero como el look debe ser completo, el interior también gana algunos detalles de mayor carácter, como un volante deportivo forrado en piel, asientos de doble tono con cuero sintético y microfibra. El techo de color negro, las alfombras, los umbrales R-Line, los pedales metálicos y los rines deportivos, cierran el conjunto.
Claro que la noticia completa sobre el T-Roc tiene más que ver con la confirmación de su oferta motriz. Abren fuego, un pequeño motor de 1.0 litros Turbo con 115 Hp y 148 lb-pie de torque. Subiendo, aparece el nuevo 1.5 TSi de la marca, con 150 Hp y 184 lb-pie de torque. Finalmente, el motor que mejor le quedaría al R-Line, un 2.0 litros TSi con 190 Hp y236 lb-pie de par que transforma al T-Roc en un entretenida camioneta.
Pero eso no es todo, en el apartado diésel Volkswagen dispone de un 1.6 TDi de 115 Hp y 184 lb-pie. También hay un motor 2.0 litros en configuración de 150 Hp y 190 Hp, todos con filtro selectivo de partículas, para no volver a pasar por las vergüenzas del dieselgate.
Como es usual en estos autos, los modelos de entrada y la gran mayoría de las configuraciones contemplarán tracción delantera, mientras que las más deportivas o las tope de línea, podrán acceder a un sistema 4Motion, con opciones de caja manual de 6 velocidades o automática DSG de 7 velocidades.
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